Infinidad de creencias rondan el tema de la lactancia, en este artículo desvelamos algunos mitos.
MITOS
• Las mujeres con pecho pequeño no pueden amamantar
• No todas las mujeres producen leche de buena calidad
• Si la madre está enojada o asustada no debe dar de lactar
• Si las madres están embarazadas de otro bebé deben dejar de amamantar
• La mujer que lacta no puede tener relaciones sexuales porque la leche se daña
• Si la madre está enferma, no debe dar de lactar y si sigue lactando no puede tomar medicación
• Una vez que se interrumpe la lactancia no se puede volver a amamantar.
REALIDADES
• El tamaño de los pechos no influye en la lactancia.
• Todas las mujeres producen leche de buena calidad y en cantidad suficiente porque la lactancia es un proceso regido por la ley de la oferta y de la demanda.
• El estrés o miedo extremo puede aletargar el flujo de leche pero se trata de una respuesta temporal del organismo ante la ansiedad.
• Aún estando embarazada de otro bebé la madre puede seguir amamantando. Algunas hormonas que el cuerpo produce en el período de gestación, pueden cambiar el sabor de la leche (¡pero no su calidad!) y por lo tanto el niño podrá progresivamente dejar de lactar.
• Las relaciones sexuales no dañan la leche.
• Si la mujer está enferma (gripe, resfriado, tos, etc. ) puede amamantar. Si se trata de otra enfermedad más grave, antes de tomar cualquier medicación, deberá consultar su médico.
• Con una técnica adecuada y apoyo, tanto las madres como los bebés pueden retomar la lactancia, luego de un cambio de leche materna a fórmula. Esta práctica es vital durante una emergencia.